Cada vez que escucho por radio o veo en televisión los
desencuentros entre taurinos y antitaurinos me viene a la cabeza una escena
estupenda de la película Tiovivo c.1950 dirigida por José Luis Garci.
Una escena que muestra como los taurinos de categoría gozan
con el toreo de salón, porque este toreo guarda la esencia de la tauromaquia. Allí pueden disfrutar de las figuras que un torero de casta debe realizar y además como podréis observar, nadie sale dañado.
¡Y todos tan contentos!
El toreo de salón ha existido desde siempre, Camilo José
Cela tiene un libro con ese título dónde
asegura “Es más difícil y meritorio esto del toreo de salón, muy
misterioso y siempre al borde del desaire. Esto del toreo de salón es como la
poesía pura o como el vicio solitario, algo que sólo es posible hallar entre
los elegidos”.
¡Pues eso!
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